Apocalipsis 10

1 [1] Vi descender del cielo otro ángel fuerte, envuelto en una nube, con el arco iris sobre su cabeza. Su rostro era como el sol y sus pies como columnas de fuego.
2 Tenía en su mano un librito abierto; puso su pie derecho sobre el mar y el izquierdo sobre la tierra
3 y clamó a gran voz, como ruge un león; y cuando hubo clamado, siete truenos emitieron sus voces.
4 Cuando los siete truenos hubieron emitido sus voces, yo iba a escribir; pero oí una voz del cielo que me decía: "Sella las cosas que los siete truenos han dicho, y no las escribas".[2]
5 El ángel que vi de pie sobre el mar y sobre la tierra levantó su mano hacia el cielo
6 y juró por el que vive por los siglos de los siglos, que creó el cielo y las cosas que están en él, y la tierra y las cosas que están en ella, y el mar y las cosas que están en él, que el tiempo no sería más,[3]
7 sino que en los días de la voz del séptimo ángel, cuando él comience a tocar la trompeta, el misterio de Dios se consumará, como él lo anunció a sus siervos los profetas.
8 La voz que oí del cielo habló otra vez conmigo, y dijo: "Ve y toma el librito que está abierto en la mano del ángel que está en pie sobre el mar y sobre la tierra".
9 Fui donde el ángel, diciéndole que me diera el librito. Y él me dijo: "Toma y cómelo; te amargará el vientre, pero en tu boca será dulce como la miel".
10 Entonces tomé el librito de la mano del ángel y lo comí. En mi boca era dulce como la miel, pero cuando lo hube comido amargó mi vientre.[4]
11 Él me dijo: "Es necesario que profetices otra vez sobre muchos pueblos, naciones, lenguas y reyes".

Notas:

[1] 10.1--11.14 La visión de 10.1-11 incorpora diversas imágenes de Ez 1--3. Esta sección y la siguiente (Ap 11.1-14) son como un interludio entre la sexta trompeta y la séptima (Ap 11.15).

[2] 10.3-4 Los siete truenos sugieren la voz de Dios (Sal 29.3-9). En Apocalipsis, los truenos generalmente se relacionan con el juicio y la ira de Dios (cf. Sal 29.3-9; Ap 8.5; 11.19; 16.18).

[3] 10.6 El tiempo no sería más: También puede traducirse Ya no habría más demora, o El plazo se ha cumplido. Cf. Dn 12.6-7.

[4] 10.8-11 El librito: Cf. 10.2. Se trata de un pequeño libro en forma de rollo (véase Ap 5.1 n.). La experiencia de Ezequiel fue muy similar (Ez 2.7--3.4); solo que aquí, después de lo dulce del mensaje de Dios, viene lo amargo, que refleja lo terrible del castigo y la dolorosa suerte de los mensajeros, que han de sufrir y morir por su testimonio.